HEIDENHEIM, ALEMANIA — Los líderes de la liga, Bayern Múnich, sentados cómodamente en la cima de la tabla de la Bundesliga con 38 puntos, viajaron para enfrentar al Heidenheim, ubicado en el puesto 17, sabiendo que tres puntos consolidarían aún más sus credenciales para el título. Los gigantes bávaros cumplieron exactamente con eso, asegurando una contundente victoria de 0-4 que destacó el abismo entre la élite de Alemania y aquellos que luchan contra el descenso.
El Bayern Múnich dominó el balón con un 73.9% de posesión, acorralando al Heidenheim durante largos períodos, y el marcador reflejó esa superioridad. Josip Stanisic abrió las compuertas en el minuto 15, cabeceando desde muy corta distancia tras un córner para dar ventaja temprana a los visitantes. El posicionamiento del defensor croata resultó crucial ya que el poderío en jugadas de balón parado del Bayern abrumó la estructura defensiva del Heidenheim. Michael Olise duplicó la ventaja en el minuto 32 con una definición clínica de pie izquierdo desde muy corta distancia, mostrando el tipo de compostura que ha hecho al Bayern tan letal esta temporada. La segunda mitad vio al Bayern continuar su asalto implacable, con Luis Díaz cabeceando desde distancia mínima en el minuto 86 tras un excelente trabajo de Stanisic. Harry Kane completó la goleada en tiempo de descuento, disparando un tiro de pie derecho desde el centro del área al ángulo inferior derecho tras la asistencia de Serge Gnabry, coronando una clase magistral de fútbol ofensivo.
La batalla táctica fue decididamente unilateral ya que el equipo de Vincent Kompany controló cada fase del juego. Leon Goretzka y Raphaël Guerreiro dictaron el tempo en el mediocampo, mientras que Jonathan Tah y Dayot Upamecano permanecieron en gran medida sin problemas en la defensa. Los mejores momentos del Heidenheim llegaron a través de Marvin Pieringer y el suplente Stefan Schimmer, con este último golpeando el travesaño en el minuto 56 en un raro momento de peligro. Sin embargo, el portero del Heidenheim se mantuvo ocupado, realizando seis atajadas para evitar un marcador aún más enfático. Patrick Mainka y Benedikt Gimber trabajaron incansablemente en defensa pero se encontraron constantemente retrocediendo mientras el tridente atacante del Bayern formado por Kane, Olise y Lennart Karl sondeaba sin descanso.
El Bayern Múnich lanzó 23 disparos a portería en comparación con los siete del Heidenheim, con 11 de esos esfuerzos obligando a Ramaj a entrar en acción. La presión del Bayern produjo seis córners frente a cero del Heidenheim, subrayando el dominio territorial que los hombres de Vincent Kompany disfrutaron durante los 90 minutos. Las estadísticas pintaron un cuadro de control completo, con el Heidenheim logrando solo un disparo a portería a pesar de sus mejores esfuerzos por interrumpir el ritmo del Bayern.
El punto de inflexión llegó temprano cuando el cabezazo de Stanisic en el minuto 15 le dio al Bayern la plataforma perfecta. Una vez adelante, los visitantes nunca parecieron dispuestos a ceder el control, asentándose en un ritmo que les permitió desmantelar la forma defensiva del Heidenheim a voluntad. Kane golpeó el poste en el minuto 53, un momento que epitomizó el dominio del Bayern ya que incluso sus tiros fallados llegaban con frecuencia alarmante para los asediados anfitriones.
De cara al futuro, el Bayern Múnich recibirá al Wolfsburg el 22 de diciembre, mientras que el Heidenheim viajará para enfrentar al Union Berlín el 21 de diciembre mientras buscan desesperadamente puntos en su batalla contra el descenso.